SOBRE

La educación ambiental ha trabajado, desde años, por mejorar y comprender las relaciones humanas con el medio ambiente. Desde la complejidad de la realidad humana en todas sus dimensiones, políticas, económicas, sociales o naturales, ha tratado de orientar el proceso educativo para tomar conciencia de nuestro entorno y ajustar las necesidades humanas a las capacidades de la naturaleza. No obstante, por un lado, seguimos lejos de una cultura que construya un desarrollo eco-social, respetuoso y responsable con lo que nos rodea, mientras que, por otro lado, la educación ambiental se cubre de manera irregular en los planes de estudios y de manera poco exhaustiva en nuestra comunidad europea, siendo la figura del/la educador/a ambiental una profesión no reglada y poco reconocida.

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Sin embargo, este no es el único reto al que hacer frente desde la educación ambiental. En estos momentos de crisis ambiental y cambio climático urge impulsar una cultura ambiental y una transformación ecosocial que despliegue accesos a una información actualizada de la problemática en la que nos encontramos, con vistas a

generar que la conciencia sobre los problemas ambientales se transforme en acciones, tanto individuales como sociales, consecuentes con su contexto socioambiental.

Este congreso busca abordar temas cruciales relacionados con el medio ambiente y la sostenibilidad, proporcionando a la ciudadanía, una plataforma para aprender, discutir y colaborar en la construcción de un futuro más verde. Cada tema ha sido seleccionado para destacar la relevancia y el papel activo que cada persona puede desempeñar en la mitigación de los problemas ambientales.  La justificación subraya la importancia de la educación, la participación ciudadana y la implementación de soluciones innovadoras en la creación de comunidades sostenibles.

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En cualquier congreso medioambiental hay que abordar de alguna forma los grandes problemas ambientales que tenemos.

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• Analizar la economía circular y fomentar el consumo responsable entre los ciudadanos contribuye a la reducción de la huella ecológica. Este enfoque crítico en la forma de vivir y consumir promueve prácticas más sostenibles.

• Explorar la conexión entre el medio ambiente y la salud humana resalta la importancia de abogar por entornos más saludables y sostenibles. Revisar la forma de alimentarse destaca la relación directa entre la salud personal y la salud del planeta. Integrar la educación ambiental en los sistemas educativos y programas extracurriculares es clave para empoderar a los jóvenes con conocimientos sobre sostenibilidad. Esto facilita la formación de una sociedad consciente y responsable, capaz de abordar desafíos ambientales de manera individual y colectiva.

• Analizar el papel activo de los ciudadanos y las ciudadanas en la defensa del medio ambiente destaca la importancia del activismo juvenil.

• Proporcionar ejemplos de movimientos exitosos y herramientas para fomentar la participación ciudadana motiva a los jóvenes a ser agentes de cambio. Destacar proyectos comunitarios liderados por personas luchadoras inspira a otros fomenta la colaboración y el activismo comunitario.

Consideramos importante mantener en los más jóvenes actividades de educación ambiental, dentro y fuera de los centros educativos, pero pensamos que el cambio tiene que ser ya. Para que esto suceda necesitamos que los gobiernos y empresas sean los decisores reales y también que la educación ambiental debe ser reconocida como una herramienta fundamental, poniendo en claro cuales son las habilidades y conocimientos necesarios para ejercer esta profesión y que las condiciones laborales permitan una vida digna.